Durante el día de hoy 576 de las 790 pantallas existentes en Cataluña, un 73% del total, han cerrado sus puertas en protesta de la Ley del cine catalán aprobada el pasado 12 de Enero por la Generalitat.
Esta Ley obliga a que el 50% de las películas proyectadas estén dobladas o subtituladas al catalán, con excepción de las películas europeas que cuenten con 15 o menos copias, y las películas en versión original castellana o catalana. En cambio todas las películas americanas, independientemente del número de copias, sí deberán distribuir la mitad de sus copias en catalán. Asimismo, en el caso de distribución por otros canales, como el DVD, la Ley prevé que también se debe incluir una versión en lengua catalana en el menú idiomas. Estas medidas deberán aplicarse en un plazo no superior a cinco años y, de momento, dos de las majors estadounidenses más importantes, como Paramount y Disney, amenazan con no distribuir todas sus películas en Cataluña.
Para aquellos que no cumplan la Ley hay previstas sanciones: hasta 75.000€ por exceder la cuota de películas comunitarias en un 60%, y entre 5.000€ y 1.000€ por copia que incumpla la obligación de distribución.
Opinión:
Personalmente todo lo que sea fomentar la cultura me parece perfecto. Ahora bien, lo que espero es que se garantice el derecho de todo ciudadano que acuda a un cine a poder elegir el idioma en el que quiere ver una película libremente y con igualdad de opciones (si bien la situación actual no me parece de igualdad, ya que sólo el 3% de las películas se doblaron al catalán el año pasado). ¿cómo se va a llevar esto a cabo? Esto es lo que me preocupa.
El caso es que si se obliga a doblar en ambos idiomas una película, ¿cómo se llevará a cabo la proyección en cines para garantizar esa igualdad de elección? ¿poner en dos salas la misma película pero en diferente idioma? ¿misma película en la misma sala con los dos idiomas en diferentes horarios? Creo que la implementación de esta Ley no es tan sencilla como pretende vendernos alguna de las partes
Una buena solución, desde mi humilde punto de vista y como acabo de comentar podría ser, por ejemplo, ofrecer una película en ambos idiomas en una misma sala en sesiones alternas, o quizás algo más transgresor, a nivel de normalización lingüística, sería ofrecer cine en versión original con opción de escuchar la pista de audio que se desee mediante el uso de algún tipo de audífono (claro que esto impediría disfrutar de los equipos de audio envolvente que ofrecen muchas salas).
Sea cual sea la forma de llevar a cabo esta nueva Ley llevarla a término le va a resultar más caro a las distribuidoras y/o a las salas. Primero por la obligación de doblar en dos idiomas la película, segundo porque quizás no salga igual de rentable mantener una sala con un idioma a la que no acuda suficiente público para hacer rentable su proyección. Y luego algo que me preocupa, ¿y los cines que no sean multisala?
Aquí no puedo evitar pensar en el cine existente en mi localidad, el cine CAPRI (El Prat de Llobregat, Barcelona), un cine de barrio que sólo cuenta con una sala. ¿Qué debería hacer este cine que habitualmente sólo abre los fines de semana y que sólo proyecta una película por semana? ¿También debe proyectarla un 50% en ambos idiomas? ¿Hará perder aún más público a este tipo de cines esta nueva Ley? (que duplica las opciones lingüísticas pero reduce a la mitad las sesiones disponibles en un idioma al ya reducido horario de apertura). ¿Deben estas pequeñas salas añadir costes extras a su ya crítica situación?
Aún está todo por ver y espero, de verdad, que la aplicación de esta nueva Ley pueda beneficiar a todos pero me temo, y espero equivocarme, que aunque las grandes salas puedan sobrellevar los posibles costes que pueda conllevar esta nueva Ley, los pequeños cines de barrio no puedan aguantar mucho tiempo una posible reducción adicional de sus ya pobres beneficios. También espero, como ya he dicho, que la igualdad de elección sea real y que ahora no intenten imponer el catalán sobre el castellano, ya que creo que esto repercutiría negativamente en la afluencia de una buena parte del público actual de las salas.
Por ver está como se implanta esta Ley.
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