Ficha Técnica:
Director: Álex de la Iglesia
Género: Suspense
Duración aprox: 110 mins
Año: 2008
Intérpretes: Elijah Wood, John Hurt, Leonor Watling, Julie Cox, Jim Carter
Música: Roque Baños
Fotografía: Kiko de la Rica
Sinopsis
Una anciana aparece asesinada en el salón de su casa a las afueras de Oxford. Su cuerpo es descubierto por dos hombres que en ese momento se encuentran por primera vez: Arthur Seldom, prestigioso profesor de Lógica, y Martin, un joven estudiante americano recién llegado a la universidad con la intención de que el famoso profesor dirija su tesis doctoral.
La muerte de la anciana no es sino el primero de una serie de asesinatos con inquietantes puntos en común. Son crímenes casi imperceptibles, que podrían incluso pasar por muertes naturales si no fuera porque cada uno de ellos viene acompañado de un mensaje: una imagen, un signo diferente en cada ocasión que, muerte a muerte, va dando forma a una serie cuya lógica deberán descifrar los protagonistas.
Recorrer ese camino supondrá poner a prueba no solo las convicciones matemáticas sino la propia forma de entender el mundo del profesor y del alumno ¿Podemos conocer la realidad? ¿Es posible alcanzar la verdad?
Comentario: (AVISO: Puede contener SPOILERS)
Basada en la novela de Guillermo Martínez «Crímenes Imperceptibles«, tenía muchas ganas de ver la nueva película de Álex de la Iglesia que por la sinopsis, el elenco de actores y el trailer me había generado una expectativa algo alta pero, tras verla he de decir que he salido algo decepcionado del cine y, dicho sea de paso, no es ni mucho menos porque la película sea mala (que no lo es) sino porque las piezas que conforman el todo encajan pero, en ocasiones, forzándolas un poco. Me explico.
Cuando empieza la película te presentan a tres de los cuatro protagonistas principales de forma que los conozcas desde el primer momento y ¡zas!, de repente todo empieza. El primer asesinato sucede y aparecen los protagonistas simultáneamente de forma que, desde el primer momento todo el mundo es sospechoso. Desde ese momento quieras o no, pues para eso has ido a ver ésta película al cine, tu misión es averiguar quién es el asesino y quién puede ser el asesino en serie que amenaza con nuevas muertes.
Entonces justo después de estos 20-25 minutos, empiezan a confrontarse las diferentes visiones de la realidad que tienen los dos protagonistas. La visión excéptica, desencantada y defensora de lo fortuito del profesor Arthur Seldom (John Hurt) contra la visión científica y entusiasta del lógico Frodo Martin (Elijah Wood). Todo, absolutamente todo a partir de entonces sucede en un mundo de filosofía, simbología y matemáticas. Todos son sospechosos, nadie confía en el otro y el tiempo juega en su contra. Justo ese chorro de información es una de las cosas provoca que en algún momento se pierda momentáneamente el hilo de la película y que el espectador se agobie un poco.
Otra de las cosas que a mi personalmente me molesta, y que parece que está de moda, es la dichosa manía de «mover» la cámara durante la filmación. Hay un momento en la película en la que la cámara persigue a varios personajes dentro de una librería y por un par de calles y, a mi por lo menos, me marea.
Y, dejando aparte el tema de que los personajes a veces me parecen de broma (como el compañero «Golum» de despacho que tiene Martin o el padre loco que tiene una hija enferma) o algunas escenas (como la escena en la que toca la orquesta en la fiesta de disfraces) que me parecen que se resuelven de forma poco efectiva, hablemos un poco de los protagonistas.
El tándem Elijah Wood / John Hurt es bastante bueno aunque en ocasiones sea algo cargante con tanto rollito simbólico. Elijah Wood hace una interpretación como no me esperaba, atrás quedó Frodo. Bien por él.
El personaje de Beth (Julie Cox) me encanta. Es intrigante, sospechosa terminal desde el principio, vamos almenos yo sospeché de ella desde el principio, y la mirada de la actriz desprende misterio constantemente.
Por otro lado, me gustaría saber qué han hecho con el personaje de Leonor Watling. Su personaje es casi anecdótico limitándose, casi en exclusiva, a cumplir una función carnal en el film. Bastante desaprovechada en mi opinión (por lo demás… está excepcional 😉 )
Por último también diré que el final no me ha gustado demasiado. No porque sea un mal final sino porque es algo «made in hollywood». Para mi gusto, si la película hubiese terminado 5 minutos antes hubiese sido mejor, sin esa resolución extra al estilo Jessica Fletcher.
En definitiva, Los Crímenes de Oxford es una buena película, bien hecha y con unas interpretaciónes en general bastante buenas, aunque algo más floja de lo que parecía en un principio. Se trata sin duda del trabajo más «correcto» de Álex de la Iglesia.
Mi calificación:.
